Perros de prensa, mismo perro con distintos collares


 Avanzaba el enigmático e imprevisible Iker Jiménez en su primer programa del año 2020 que año bisiesto, año también de luces, descubrimientos, maravillas para el género humano [1]. Varios trimestres antes, en marzo de 2019, el siempre pronosticable en sus mensajes Iñaki Gabilondo sentenció que el desprestigio de la política ha arrastrado al periodismo [2]. Quizás se refería a cuando él se dejó arrastrar por Zapatero en la campaña electoral de 2008 porque “nos conviene la tensión”[3]. Sobre esto, habría que preguntarle a Iñaki si el periodismo no se dejaba arrastrar por la política en los años 60, cuando comenzó su andadura profesional en la COPE[4] o, por el contrario, dicho arrastre comienza a partir de la Transición. 

2020, el año de la secularización de la prensa

Cuenta las crónicas, que el monje agustino Martín Lutero, logró una gran difusión de sus 95 tesis contra las prácticas de las bulas papales, ejercidas por miembros destacados de la Iglesia Católica, gracias al uso de la imprenta inventada décadas antes por Johannes Gutenberg. También se sirvió de esta para reproducir ejemplares de la Biblia traducidos al alemán moderno temprano. Estaba decidido a “hablar como lo hace la gente en elmercado”; y en las décadas que siguieron se imprimieron en Wittenberg más de 100.000 copias de la “Biblia de Lutero”, contra sólo 180 de la Biblia en latín de Gutenberg [5]. Además, gracias a la imprenta surgieron numerosos periódicos, en 1615, nació el Frankfurter Journal, de Alemania; en 1622, el periódico inglés Weekly News; en 1640, la Gazzeta Publica, de Italia; en 1641, la Gaceta semanal, de Barcelona, y en 1661, La Gaceta, de Madrid... Anterior a este último es el Post-och Inrikes Tidningar, de Suecia, el periódico más antiguo del mundo que aún hoy continúa editándose, y que fue publicado por primera vez en 1645 [6].

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Perros de prensa, mismo perro con distintos collares - Manuel Rodríguez Sancho (posmodernia.com)